Mi nombre es Liz y apenas hace un año que estoy jugando con todo esto.
Todo empezó una mañana de sábado sólo abrir los ojos, era el santo de mi ahijado y no tenía ningún regalo preparado, y como inspiración de algo que ni siquiera yo sé, me levanté de la cama y me fui a la mercería habitual a por cuero.
Pensé regalarle una pulsera como algunas que podríamos encontrar en tiendas de artesanos, y que mejor, que estuviera confeccionada por mi misma. Así lo hice. Sigue leyendo →