DIY significa “Do it yourself” y es la práctica de fabricar objetos, decorar o hacer reparaciones uno mismo. Se trata de un movimiento cultural al que Internet ha dado un impulso considerable, pues por este medio es posible encontrar indicaciones para crear piezas u objetos, reformar o reparar sin necesidad de comprar las cosas hechas con procedimientos industriales. El DIY está asociado también a un movimiento de anti consumismo, cuidado ambiental y revalorización de lo hecho a mano.

Hazlo tú mismo: DIY

Luego de una época de industrialización y excesivo consumo, el hacer las cosas por uno mismo va cobrando día a día más adeptos.

El DIY es un movimiento cultural casi filosófico, pues quienes lo practican consideran que es de gran ayuda para el cuidado ambiental (se minimizan los desechos y los procesos productivos nocivos al ambiente) así como para reducir el excesivo consumo o consumismo.

El DIY puede ser llevado a cabo por cualquier persona, independientemente si tiene o no experiencia o estudios en técnicas artesanales.
Y más allá de los resultados, hacer las cosas uno mismo tiene un valor que no se puede medir. En el proceso la persona aprende no sólo las técnicas para producir objetos, sino que aprende a solucionar problemas con su ingenio e intelecto, sin que el dinero sea parte de esta ecuación.

Otro valor del movimiento DIY es que aprendemos a valorar el trabajo hecho a mano, justipreciamos las cosas sencillas, el cariño y la inversión de tiempo y esfuerzo, que es lo más valioso de recibir un regalo hecho a mano hecho por los niños o por un ser querido.

¿Qué opinas tú al respecto?

Imagen: freshhomeideas